“Los libros de Xulia”
Llegaste un día y me dijiste -Ten
guárdamelos, es que voy hacer un largo viaje y se de sobra que me los vas
cuidar.
Ya más de año y medio desde que te fuiste y ahí están donde los dejaste, en el suelo, atados, para que nadie ose abrirlos salvo yo su fiel guardián que de vez en cuando con mimo abro sus páginas y me pongo a leerlas hasta que se me nublan los ojos recordando el día que nos dejaste para siempre.