Recuerdo ese día, era por
la tarde.Estaba yo tumbado en la hierba de mi huerta, absorto en la música que
sonaba en mis oídos eran unas lánguidas melodías de Ángelo Badalamenti. De
repente cruzó ante mis ojos un caracol y
lo seguí con la mirada en un principio. Decidí fotografiar ese tardo caminar
que me recordaba al lento caminar de Richard Farnsworth el protagonista de “The
Straight Story cuya BSO era la que estaba escuchando.
Creo que el hecho de estar tanto tiempo fotografiando al
testáceo y su largo recorrido por la verde hierba para algunos de mi entorno
resultó tan estraño, tan alejado de lo cotidiano que seguro que por
momentos han dudado de mi cordura.
La armonía que emana en mi el recuerdo de aquella sesión fotográfica
campestre me hace creer que aquella
tarde que pasé en la huerta fué como dice Pablo Kurt, un canto
a la vida.
|
8 Comments:
Amigo Raraher tú tienes de loco lo que yo tengo de cura.
Un abrazo y cuida esa morriña.
PD. Como puedes vivir sin telefono puesto que te llamo y llamo y siempre lo tienes apagado.
Eso no es falta de cordura es como tú bien dices debajo de tu foto que hay a la derecha sumergirte completamente en una realidad.
Te mando un saludo y decirte que toda la música que compuso Ángelo Bodalamenti para esa obra maestra del cine actual “The Straight Story” es sencillamente sublime.
La foto del caracol muy buena.Un abrazo.
Amigo Anxo mi teléfono está siempre apagado porque lo tiré al fondo de la ría de Ares y desde que realicé ese acto soy un poco más feliz.
En un mundo que ama la velocidad... un caracol parece algo anticuado, y sin embargo, qué bien viene la parsimonia a veces.
Salu2.
Preciosa foto, precioso pensar y preciosos apostar. Concerniente al "canto a la vida"; es la maera más loable de agraceder, acariciar y matizar que las melodías forman camino para recorrer en la vía de nuestros días.
Gracias por los efluvios que me has mandado al Fnac. Ha sido colosal, me presntó el prologuista del poemario Siro López. Todos que lo conocemos, sabemos sus dotes de inteligencia, a la par de sencillez que él tiene pegado a su gran saber. Lo dicho ha sido precioso y el lleno era total.
Gracias y que la morriña no curse en ti dolor de espíritu.
Un abraciño,
Rosa María
Un abraciño,
Ro
A veces un poco de locura nos hace ser mas humano.
un abrazo
fus
Pasaba otra vez por aquí para recomendarte que dieras una vuelta por un blog llamado “El bosque de trimbolera”. Su autora y tu tenéis algo en común. Te sorprenderá.
Unha aperta.
¿Dónde andas? Nos has dejado al caracol y no has vuelto. Espero que estés bien y tengas tiempo para entrar en tu blog.
Un abraciño,
Rosa María Milleiro
Publicar un comentario
<< Home